El desprendimiento de retina en sí mismo es indoloro, pero las señales de advertencia casi siempre aparecen antes de que ocurra o haya avanzado, como por ejemplo:
- Photopsia, o flashes repentinos y breves de luz, fuera de la parte central de la visión o visión periférica. Los flashes son más propensos a ocurrir cuando el ojo se mueve.
- La aparición repentina de muchos flotadores: pequeñas motas que parecen derivar a través de su campo de visión.
- Visión borrosa.
- Visión lateral periférica, gradualmente reducida
- Una sombra similar a una cortina sobre el campo visual.
- Las líneas rectas comienzan a aparecer curvadas.
Las personas con más riesgo de sufrir un desprendimiento de retina, y los factores principales:
- Envejecimiento: el desprendimiento de retina es más común en personas mayores de 50 años.
- Desprendimiento de retina previo en un ojo.
- Una historia familiar de desprendimiento de retina.
- Miopía extrema.
- Cirugía ocular previa, como la eliminación de cataratas.
- Lesión ocular grave previa.
- Otras enfermedades o inflamaciones oculares previas.