
El astigmatismo primario no es un defecto prevenible, pero su no compensación en la etapa activa de desarrollo visual, puede derivar en otros problemas añadidos, como por ejemplo, la ambliopía
El astigmatismo primario no es un defecto prevenible, pero su no compensación en la etapa activa de desarrollo visual, puede derivar en otros problemas añadidos, como por ejemplo, la ambliopía.
Es importante tener en cuenta los síntomas. No obstante, muchos de ellos son compatibles con otras anomalías visuales, por lo que la mejor manera de controlarlos es acudir a su optometrista de forma periòdica que, como agente sanitario de atención primaria, efectuarà una revisión visual completa. Si el optometrista considera que el este defecto visual, se debe a una patologia (por ejemplo queratocono), le derivará a otros especialistas.